Lavamos y despuntamos las berenjenas y a continuación las cortamos en rodajas (horizontales o verticales, al gusto y dependiendo del recipiente en el que vayamos a hornear) de unos 5 mm. Es tradición italiana freirlas (rebozadas o no), pero para aligerar un poco el plato, vamos únicamente a hacerlas a la plancha con un poco de aceite. Deberán quedar blanditas y ligeramente tostadas, podremos distinguir bien el punto de cocción idóneo por el color transparente que adquiere la berenjena. Por otro lado, mientras se precalienta el horno, vamos a preparar las cazuelas donde se terminará de cocinar el plato; podremos presentarlo de distintas maneras, en cazuelas individuales o fuente para compartir. Disponemos por el siguiente orden 3 capas de manera que cubran toda la superficie de la cazuela de barro: berenjena, parmesano, mozzarella y salsa de tomate. Una vez hayamos terminado la tercera capa, espolvorearemos una buena cantidad de queso parmesano, para que selle la receta de manera rotunda y sabrosa. Introducimos en el horno unos 15-20 minutos a 180º y lo sacamos una vez el queso se haya fundido por completo y empiece a dorarse.
Ingredientes para 4 personas
2 Berenjenas grandes 200 gr. queso mozzarella en rodajas 100 gr. de queso parmesano rallado salsa de tomate pimienta negra solida y orégano (optional)
Utilizamos cookies analíticas de terceros. Puedes aceptar las cookies pulsando el botón “Aceptar” o rechazarlas pulsando el botón “Rechazar”. Para más información hacer click en leer más.AceptarRechazarLeer más